Los Ángeles y su ayuda incondicional

Cada uno de nosotros puede recibir ayuda e información de los ángeles, sin importar nuestra religión o nivel de educación. Desde niños, hemos tenido comunicación con éstos maravillosos seres, pero a veces los mismos adultos que nos rodean y la interacción con el mundo nos hace olvidar ésta preciosa conexión. Nosotros podemos reabrir ésta comunicación en cualquier momento que queramos con solo creer en que podemos hacerlo y dejando ir los miedos.

Si tienes dudas sobre si la información que estas recibiendo proviene de tu imaginación o de tus ángeles, puedes pedirle a ellos que te den señales ( además que esto les encanta!). Recuerdo una vez que les pedí que si me podían dar la señal de manera tal de que yo sintiera de que ellos iban a estar acompañándome un una situación que yo estaba pasando en ese momento. Así que ese día, salí al patio de atrás de mi casa con mi perro y de pronto, mientras estaba parada esperando por él, cayó justo en mis pies (no sé de dónde) una pequeña pluma de un ave.

Normalmente no suelo encontrar plumas así que me caigan de la nada así que lo tome como señal. Me sonreí y les di las gracias a los ángeles por ese mensaje. Luego, al final de la tarde, cuando salí del garaje de mi casa para montarme en mi camioneta, encontré al lado de la puerta otra pluma. Les di otra vez las gracias y sentí que estaban reforzando su señal para darme la seguridad de que todo iba a salir bien y la situación se iba a resolver.

Recibí de los ángeles una ayuda muy importante en mi vida cuando me operaron de cáncer a la edad de 17 años. En la mesa de operaciones había perdido demasiada sangre y necesitaba de una transfusión urgente. Debido a que soy del tipo O negativo, no había sangre de ese tipo en ese momento en el Banco de Sangre del Hospital. Mi Madre estaba desesperada, y
con sus manos en la cabeza le pidió a Dios y a los ángeles que la ayudaran. De pronto delante de ella se paró una señora que le dijo: “oí su conversación con el médico de su hija, no se preocupe yo tengo ese tipo de sangre, venga conmigo que yo voy a ser su donante”. Mi madre no lo podía creer! De dónde salió ésta amable señora con mi tipo de sangre y dispuesta a donarla?

Luego de la donación mi madre trató de buscar a la señora para agradecerle nuevamente su valiosa ayuda, pero la señora ya no estaba, ninguna de las enfermeras le pudo decir a mi madre dónde estaba la gentil señora que me había donado su sangre. Solo una intervención divina podía explicar tan asombroso hecho.

Nunca consideres que lo que le quieres pedir a los ángeles sea de poca importancia. Ellos te ayudarán hasta en las cosas más cotidianas tal como puede ser un puesto en un estacionamiento lleno de carros, o la intervención para la que una persona salga de un problema o una enfermedad, o si tu te encuentras en un lugar que no es familiar para ti y sientes que no es seguro para ti o los tuyos, pídele a los ángeles su protección que ellos con gusto te la dará y te sorprenderás!. 

Ellos no discriminan en el tipo de peticiones que reciben, siempre que lo hagas con amor y fe. Atrévete a creer, a darle entrada en tu vida a estos mensajeros de Dios que están a nuestro alrededor con el amor mayor posible! Viniendo de Dios no podía ser de otra manera sino el de darnos amor incondicional!